Por fin llegó la cosecha, el clima en verano ha sido un tanto irregular, pues prácticamente ha hecho más calor en el mes de septiembre, que en julio y agosto, será el cambio climático, o vaya usted a saber ...
Decidimos empezar a recoger la uva blanca de la variedad viura, con un grado correcto comenzamos a vendimiarla, siempre en cajas de entre 10 y 15 kilos para que el fruto no sufra y llegue en perfecto estado a la bodega, además se da la circunstancia que la cantidad cosechada nos permitirá elaborar un monovarietal, no mucho, pero lo suficiente para tener una idea del potencial de esta variedad en estas tierras de Cifuentes.
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| Racimo de viura |
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| Variedad viura dentro de la estrujadora |
El Viernes 26 comenzamos a vendimiar las variedades tintas (tempranillo, merlot y graciano), este año ya hemos empezado a recoger algún racimo de petit verdot (variedad en la que yo creo firmemente). Es impresionante ver la calidad de la uva que hemos recogido, racimos con un grado de maduración ideal para elaborar buenos caldos y una calidad de la uva que me dejan anodado. Este año si no me falla la intuición y mi mano, creo que voy a elaborar un vino casi perfecto, además como siempre, sin aditivos, sin conservantes, sin añadidos que adulteran la idiosincrasia del terruño de donde procede la uva. Este año estoy muy orgulloso de todo el esfuerzo empleado para llegar a la vendimia.
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| Las primeras cajas ya recolectadas |
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| Racimo de tempranillo |
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| Máximo cuidado en el proceso de elaboración |
Cada año, nos cuesta menos trabajo, hemos ido memorizando todos los pasos a seguir y hemos optimizado los tiempos empleados en cada uno de los procesos, el resultado está siendo extraordinario.
La cosecha y la primera fase de la elaboración con el comienzo de la fermentación tumultuosa ha sido casi perfecto ... ¡¡nos vemos en el prensado!!
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