Cuanta historia tiene "la jarrilla roja de porcelana", gran apego le tenía mi padre, el Paco, así se llamaba, y así le recordamos. Desconozco la cantidad de trasiegos en los que ha estado involucrado este elemento durante la vida de la bodega. Creo que estuvo ahí siempre, soy incapaz de ubicarlo en el tiempo, lo recuerdo de toda la vida. Yo la sigo utilizando, no sé si por nostalgia, o por que en el fondo es una práctica herramienta con capacidad multiusos.
Toda esta introducción, para decir, que hoy he realizado el trasiego de verano. Aunque la temperatura en la bodega es aceptable, es conveniente "limpiar" el vino, si cabe aún más, cuando las temperaturas son más altas, pues los restos de levaduras y otros compuestos presentes en el vino pueden ocasionar graves defectos en el mismo. Es lo que tiene no utilizar bombas de trasiego con filtros.
Trabajo acabado, cuando tenga un ratillo probaré el vino de la cosecha 2011, con tranquilidad, pues no soy un experto sumiller, y como siempre digo, sabré si me gusta o no. Uno de los objetivos del trasiego de hoy ha sido eliminar algo de carbónico que creo que había presente, le he dado un buen aireado, por lo que el objetivo seguramente está conseguido.
De la cosecha 2011 hemos elaborado 2 depósitos con composiciones diferentes: En el depósito más pequeño, hemos hecho un vino con un 52% de tempranillo, 33% de merlot y 15% de graciano, todas las uvas procedentes de la viña en espaldera. En el depósito más grande, la distribución ha sido de 89% de uvas de la variedad tempranillo, de cepas en vaso de más de 70 años de antigüedad, y 11% de uvas graciano de la viña en espaldera.
Veremos que ha salido de todo esto, el siguiente paso será "confinar" el vino en las barricas ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario